El 13 de noviembre del año 2010, Don Alejo Garza Tamez prospero empresario maderero de 77 años de edad, murió defendiendo su Rancho “San José”, ubicado en las inmediaciones de la Presa Padilla, a 15 kilómetros de Ciudad Victoria en Tamaulipas.
Días antes de su muerte, un grupo de sicarios de los Zetas visitaron a Don Alejo de manera intimidatoria, le dijeron que les había gustado su rancho y que le daban 24 horas para que lo desalojara.
Un día antes de la tragedia, el empresario ordenó a todos sus trabajadores que no se presentaran a trabajar.
Garza Tamez un experimentado cazador, se dedico a reunir todas las armas con las que contaba.
La tarde del sábado 13 de noviembre, varias camionetas de "Los Zetas" arribaron al rancho San José, entraron gritando, se querían asegurar que no había nadie. Minutos después, varios Zetas entraron caminando por la puerta principal.
Las luces del rancho estaban apagadas, el rancho se veía desolado, sin embargo, Los Zetas no sabían que Don Alejo estaba atrincherado dentro de la casa principal, con varias escopetas y pistolas.
Las luces del rancho estaban apagadas, el rancho se veía desolado, sin embargo, Los Zetas no sabían que Don Alejo estaba atrincherado dentro de la casa principal, con varias escopetas y pistolas.
Sin previo aviso, el dueño disparó a los desprevenidos sicarios que entraban caminando, en esa primera ráfaga mató a 4 pistoleros. Los Zetas sorprendidos respondieron a las balas, en un principio pensaron que todos los trabajadores estaban dentro de la casa.
Los Zetas fiel a su ferocidad, respondieron con más poder, con armas y granadas de fragmentacion, casi destruyeron el lugar.
Los Zetas fiel a su ferocidad, respondieron con más poder, con armas y granadas de fragmentacion, casi destruyeron el lugar.
Don Alejo Garza Tamez, había colocado en sitios específicos las armas, de esta manera tendría diversos flancos para poder disparar. Don Alejo hábilmente empezó a disparar, se movía a cada sitio donde las tenia ubicadas.
Finalmente y después de muchos minutos de disparos, los atrincherados dejaron de disparar, Los Zetas lanzaron varias granadas para evitar otra sorpresa. Cuando vieron que no había más respuesta, entraron a la casa, su sorpresa fue mayuscula, en el interior solamente encontraron en el piso a un hombre mayor, no había nadie más.
El saldo de la balacera fueron 4 zetas muertos y 3 heridos, por el bando contrario Don Alejo Garza había perdido la vida.
Finalmente y después de muchos minutos de disparos, los atrincherados dejaron de disparar, Los Zetas lanzaron varias granadas para evitar otra sorpresa. Cuando vieron que no había más respuesta, entraron a la casa, su sorpresa fue mayuscula, en el interior solamente encontraron en el piso a un hombre mayor, no había nadie más.
El saldo de la balacera fueron 4 zetas muertos y 3 heridos, por el bando contrario Don Alejo Garza había perdido la vida.
Por la mañana del día 14 de noviembre, arribaron al rancho elementos de la Marina quienes acordonaron el lugar.
Don Alejo Garza Tamez un hombre de valor, murió defendiendo su rancho, Los Zetas le arrebataron la vida, pero no su dignidad.
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